Un destello de luz atrapado en el tiempo. Este anillo cautiva con la magia iridiscente de un ópalo rectangular, cuya superficie refleja tonos celestes con brillos verdes como un cielo que desborda de encanto. Enmarcado por un delicado engaste dorado y acompañado por dos acentos brillantes, esta joya es sinónimo de elegancia serena y encanto etéreo.
Anillo tipo solitario con ópalo noble simulado en corte rectangular engarzado en plata dorada 925.
Piedra principal de 4x6 mm, secundarias de 1 mm.
Elaborado en talla 7, si requiere ajuste consulte por mensaje en Instagram @joyero_cozumel.
